Regresa la educación a Gaza en tiendas de campaña
El reciente anuncio del ministro de Educación y Enseñanza Superior del gobierno de la Autoridad Palestina, Amjad Barham, ha puesto de relieve la crítica situación educativa en Gaza.
El 18 de agosto, Barham informó que el Ministerio de Educación abrirá escuelas en tiendas de campaña para atender a los estudiantes desplazados en la Franja de Gaza, una medida desesperada pero necesaria en medio de la devastación causada por la guerra. Según el ministro, la educación debe continuar a pesar de los bombardeos y la destrucción, y el retorno a las aulas, aunque sea en estas condiciones, es esencial para el futuro de los niños palestinos.
Barham describió la situación educativa en Gaza como "trágica", enfatizando que la ocupación israelí está intentando "destruir el futuro en las almas de nuestros niños". El funcionario subrayó que de las 309 escuelas en Gaza, 290 han sido destruidas, mientras que las restantes han sido convertidas en refugios para los desplazados. Además, señaló que las universidades también han sido gravemente afectadas, con un 80% de ellas destruidas y más de 630,000 estudiantes sin acceso a la educación. La magnitud de la crisis se agrava con la pérdida de 9,500 estudiantes debido a la violencia, y otros 15,000 heridos, muchos de los cuales han quedado discapacitados.
La apertura de estas escuelas en tiendas de campaña no es un fenómeno nuevo en Gaza. A lo largo de los años, el personal educativo ha recurrido a esta solución en momentos de crisis para garantizar que la educación no se detenga. En mayo de 2024, por ejemplo, en las afueras de Rafah, una ciudad al sur de Gaza, un grupo de maestros instaló aulas en tiendas de campaña en medio de la guerra. En aquel entonces, Nehad Badria, director de una de estas escuelas improvisadas llamada Al Awdah, declaró que continuar con la educación en estas circunstancias enviaba un mensaje poderoso al mundo: "somos una nación que ama aprender y ama la educación, que rechaza la ignorancia".
En ese contexto, Al Awdah, que significa "retorno" en árabe, se convirtió en un símbolo de la resiliencia y esperanza de los estudiantes y maestros palestinos, muchos de los cuales soñaban con regresar a sus hogares. Las niñas que asistían a esta escuela, a pesar del peligro constante, mostraban su determinación de aprender, un reflejo de la lucha por mantener la educación viva en medio del conflicto.

La iniciativa actual del Ministerio de Educación de establecer escuelas en tiendas de campaña es una continuación de este esfuerzo por resistir la destrucción y asegurar que los niños palestinos tengan la oportunidad de aprender, incluso en las circunstancias más adversas. Estas estrategias no solo proporcionan un espacio para la educación, sino que también ofrecen a los estudiantes un sentido de normalidad y esperanza en medio de la guerra. En resumen, estas escuelas en tiendas de campaña representan un baluarte de resistencia y una apuesta por el futuro en un territorio marcado por la incertidumbre y la devastación.