Bibliotecas asiáticas: innovación tecnológica y cultural que inspira al mundo
Estas increíbles bibliotecas no solo están a la vanguardia en tecnología, están diseñadas para conectar comunidades, fomentar el aprendizaje continuo y preservar el patrimonio cultural.
Las bibliotecas en Asia están liderando una revolución que combina tradición e innovación. Desde herramientas de inteligencia artificial (IA) hasta bibliotecas móviles, estas instituciones están transformando la experiencia de lectura y aprendizaje. Países como Singapur, China, Indonesia y Hong Kong están impulsando avances que no solo modernizan las bibliotecas, sino que también acercan la lectura y el conocimiento a más personas.
En Singapur, la Biblioteca Nacional (NLB) fue pionera en el uso de la tecnología RFID para el rastreo y préstamo automatizado de libros, un sistema que revolucionó la gestión bibliotecaria a nivel mundial. Actualmente, la NLB continúa innovando con herramientas de inteligencia artificial generativa, como ChatBook, que permite interactuar con biografías históricas, y StoryGen, una herramienta para personalizar historias clásicas. Estas tecnologías no solo enriquecen la experiencia lectora, sino que también promueven la alfabetización digital mediante talleres y programas como la campaña SURE, que educa sobre la integridad de la información y el uso crítico de tecnologías emergentes.
En China, la Biblioteca de Pekín ha ganado reconocimiento internacional por su diseño sostenible inspirado en la naturaleza y su compromiso con la reducción de emisiones de carbono. Este enfoque le valió el Premio Biblioteca Pública del Año 2024. Sus terrazas escalonadas, que evocan el río Tonghui, y su arquitectura sostenible muestran cómo el diseño innovador puede fusionarse con la conciencia ambiental.
Indonesia, por su parte, se destaca por su Biblioteca Móvil, una red de bibliotecarios voluntarios que lleva libros a las comunidades más remotas, utilizando desde motocicletas hasta caballos. Este proyecto ejemplifica cómo la innovación puede centrarse en la inclusión social, acercando la lectura a quienes no tienen acceso a bibliotecas físicas.
En Hong Kong, la Universidad China (CUHK) implementó un dispensador de cuentos que imprime historias en inglés, chino y francés, promoviendo la lectura y la escritura entre los estudiantes. Este avance, aunque simple, es una herramienta poderosa para inspirar creatividad y amor por la literatura en las nuevas generaciones.
Además, en toda Asia se están adoptando tecnologías avanzadas como la IA para optimizar la catalogación, la búsqueda de información y la gestión de recursos. La digitalización de libros y la colaboración internacional a través de la IFLA están fortaleciendo las capacidades bibliotecarias y adaptándolas a las necesidades del mundo moderno.
La innovación en bibliotecas no es solo una cuestión tecnológica, sino un esfuerzo por conectar comunidades, fomentar el aprendizaje continuo y preservar el patrimonio cultural. Estas iniciativas en Asia son un recordatorio del poder transformador de las bibliotecas, que, al equilibrar tradición e innovación, pueden seguir siendo espacios relevantes e inclusivos en un mundo en constante cambio.
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